A. S. Neill  

Publicado por Pablo

Alexander S. Neill:

Por mucho, la obra más importante de este singular autor es “Summerhill”, en donde nos habla de la vida en la escuela del mismo nombre, dejándonos ver con esto, las bases teóricas en las que descansa su “experimento”.

El punto de partida es sencillo, “la firme convicción en que el niño es un ser bueno, y no lo contrario.” Luego, “Si se le deja (al niño) entregado a sí mismo, sin sugestiones de ninguna clase por parte de los adultos, se desarrollará hasta donde es capaz de desarrollarse.”

Estas expresiones, tienen un parecido, bastante considerable, con ciertos postulados anarquistas, mismo que le ha valido a Sumerhill varias clasificaciones en este sentido. Por ahora sólo cito lo que en palabras de Noam Chomsky es la libertad para los anarquistas: “la posibilidad concreta de que todo ser humano pueda desarrollar plenamente en la vida las facultades, capacidades y talentos de que la naturaleza le ha dotado, y ponerlas al servicio de la sociedad. Cuanto menos se vea influido este desarrollo natural del hombre por la tutela eclesiástica o política, más eficiente y armoniosa se volverá la personalidad humana.”

Pero bueno, de su parecido, y por supuesto de sus diferencias, hablaremos más en otra ocasión, por ahora baste con eso.

Así, Neill, se propone crear un lugar donde los niños puedan desarrollarse libremente, pero en una sociedad como la suya, esto no era posible así como así, no sólo eso, la propuesta, tenía como principal obstáculo a los padres. La única manera de resolver el problema (dadas las capacidades y objetivos de la escuela), era hacer un internado. No era raro en aquel contexto (el del surgimiento de la escuela), es cierto, es más, quizá Summerhill hubiese sido un internado independientemente del factor padres. Pero en nuestros tiempos (y lugares), el decir internado no causa mucha aceptación, y sí algo de rechazo. En fin, el caso es que para lograr ese “espacio libre”, fue necesaria una burbuja, que, aunque no completamente sellada (los niños pasaban el verano con sus padres, lo que tenia consecuencias algunas veces negativas, como cuenta el mismo Neill, o iban de vez en cuando al cine o algo así) marcaba, claramente, una diferencia entre el mundo de adentro y el de afuera.

Aclaro, no estoy diciendo (todavía) que la burbuja sea buena o mala, las argumentaciones en ambos sentidos no le faltan (y algunas luego se expondrán); sólo marco que es un factor característico de este “experimento”, o al menos, lo fue en un pasado (recordemos que el “experimento” sigue, aunque quizá dejó de ser experimental desde hace mucho tiempo, además, ya hay escuelas como sudbury valley, que, con un modelo parecido, creo que no es internado).

Pero bueno, en esta burbuja, bien podríamos decir que había una comunidad, una, en la que el poder mayor, por decirlo de alguna manera, lo tenía la asamblea escolar (también existente en la propuesta de Freinet), en la que participaban todos los miembros de la comunidad, y donde todas las voces tenían, o pretendían tener, el mismo valor (lo que, junto con otras cosas hace evidente la mezcla de edades) ; la comunidad se regulaba, así, directamente a sí misma.

Esta asamblea, era la única “autoridad” aceptada (además del mismo Neill, pero de esto hablaremos luego), y fuera de lo que ahí se decía, el niño tenía la libertad de hacer lo que le viniera en gana. Pero, ¿cómo iba a aprender a leer si nadie le obligaba a hacerlo?, Neill, sostenía que el niño aprendería a leer exactamente cuando quisiera hacerlo, lo que se puede argumentar con el hecho de que niños que querían ir a la universidad y que nunca habían tomado lecciones de gramática, física o algo así, podían preparase perfectamente para su examen de admisión en algo menos de un año, y no precisamente porque entraran a un curso intensivo, sino porque simplemente estaban deseosos de prepararse, ni la disciplina, ni los hábitos, ni los amigos, ni nada era impedimento, siempre y cuando el niño así lo quisiera. Pero, ¿cómo va a saber lo que quiere?, quizá esta pregunta se contesta sola y, es más, se invierte para afirmar: El niño a quien nunca se le ha dejado elegir, al momento de presentársele la libertad de escoger cómo o en qué continuar sus estudios, o su forma de vida, no sabrá que elegir, no sabrá, ni lo que quiere. En cambio, ¿Cómo no va a saber lo que quiere?, quien siempre ha elegido libremente, asumiendo las responsabilidades que eso implica. Así, la decisión de un niño “libre” será siempre más firme que la de quien no lo es, y será más difícil que este (el libre) se deje llevar por los demás, o que deje de ser congruente consigo mismo.

Como se puede ver, las bases de Summerhill son sencillas, (una enumeración de sus principios puede encontrarse en el prólogo que Erich Fromm hace en este libro, Summerhill), sin embargo, las discusiones que la propuesta levanta pueden llegar a ser sumamente complejas, como ojalá podamos ver en este blog.

Pero lo más importante de este “experimento” es que demuestra (aunque no falten cuestionamientos a esta afirmación) que la libertad funciona (luego hablaremos más de esto).

P.D.

Si les interesa saber más de Summerhill Sudbury Valley, o cualquier otra “escuela democrática” les recomiendo visiten: http://groups.msn.com/educacionenlibertadSUMMERHILL/

Por lo demás, se esperan comentarios, y se ofrecen unas disculpas por no haber publicado estos escritos (este y el anterior) antes, pues (aunque ya tiene más de un mes que los escribí) pensaba mandarlos con otros. Pero como me trabé con uno (sobre Ivan Illich), mando de una vez estos, para que se vayan comentando. Gracias.

Bibliografía:

Liendro, C. (2004) A.S. NEILL: Educar para vivir y para ser libres. Recuperado el 27 de Junio de 2008, de http://www.paginadigital.com.ar/articulos/2004/2004seg/noticias12/170694-4.asp

Alexander Sutherland Neill. (s.f.). Recuperado el 27 de Junio de 2008, de http://es.wikipedia.org/wiki/A._S._Neill

Rovner, D. (2004, 29 de octubre). [Mensaje 891]. Mensaje dirijido a http://groups.msn.com/educacionenlibertadSUMMERHILL/ general.msnw?action=get_message&mview=0&ID_Message=891&ID_CLast=891&CDir=1

Neill, A. S. (1974). Summerhill (8°. Ed.). México: Fondo de cultura económica.

Freinet  

Publicado por Pablo

Celestin Freinet.

“Freinet: Una pedagogía de sentido común” “Por una escuela del pueblo”. Con la unión de estos dos títulos de libros (el uno de una antología de Fernando Jiménez y el otro de uno de los clásicos de Freinet) podríamos resumir esta propuesta tan natural, que se materializó en las “técnicas Freinet de la escuela moderna”, que, además de ser el nombre de otro libro (muy recomendable por cierto), respondían a los avances tecnológicos (y no sólo tecnológicos) de su tiempo y lugar, que, como se darán cuenta no es el México del siglo XXI.

Sin embargo, y aquí está lo importante, su propuesta es más longeva que sus “técnicas”, por lo que el decir que la imprenta (instrumento muy característico de sus técnicas) ya no significa lo que antes, no justifica el quitarle vigencia a este pedagogo. Por lo tanto, no deja de ser importante reflexionar sobre sus implicaciones y su posibilidad actual. Veamos entonces rápidamente un poco del pensamiento de este pedagogo.

Freinet, reconoce “el derecho que posee el individuo de escoger él mismo el camino por el que se adentrará, sin cuerda, ni cadena, ni barreras.” ¿Se adentrará a qué?, al conocimiento (no sólo a él, pero para la ocasión en él lo dejaremos), además, dice que “las águilas no suben por la escalera”. Así que más que proponer un programa que es indiferente para el niño y que se debe seguir al pie de la letra, Freinet busca uno que tenga como eje central al niño, sus intereses, sus tiempos.

Pero, si bien el factor espontaneo que lo anterior pudiera implicar es importantísimo, plantea “los planes de trabajo”, otra de las “técnicas Freinet”, y nombre de otro libro suyo, en el que dice: “En realidad, ni a los niños ni a los adultos les basta la denuncia de los reglamentos y la destrucción de lo existente. LA COMUNIDAD tiene que orientarse por sí misma hacia un orden nuevo. […] Son nuestros planes de trabajo, que constituirán la síntesis de ese orden nuevo que estamos estableciendo y que sustituirá paulatinamente a la autoridad escolástica; LA COPERACIÓN EN EL TRABAJO.”

Entran entonces dos nuevos conceptos, Freinet, como habíamos dicho, pone especial énfasis en la importancia del individuo, y aquí le suma (no le resta) la importancia de la comunidad, y por lo tanto de la coperación en el trabajo. Así, subrayo “la comunidad” y “la cooperación en el trabajo”, puesto que son conceptos fundamentales en el pensamiento de Freinet, que lo separan, además, de otros autores “similares” como lo es el mismo A. S. Neill. Pero de esto, tanto de Neill, como de su propuesta, de sus diferencias y similitudes con Freinet, y de las implicaciones políticas de ambos planteamientos hablaremos luego.

Por otra parte, un aspecto importante de Freinet puede sintetizarse con esta frase suya. “¡Quitad la tarima y arremangáos!”: “Quitad la tarima, símbolo de ese condenado autoritarismo […] Bajad al nivel de los niños, para jugar su juego, ver con su óptica y reaccionar a su ritmo […] Arremangáos para trabajar con vuestros alumnos. No os contentéis con dictar órdenes y sancionar, poneos a trabajar con vuestros alumnos. No temáis ensuciaros las manos, lastimaros con un martillazo, titubear allí donde el niño más vivo restablece la situación, tantear, equivocaros, empezar de nuevo. La vida funciona así…”

Así “le quita” de alguna manera importancia al maestro, pero no deja de negársela. Así dice, y con esto cerramos este escrito que dicho sea de paso no será el último en el que sobre Freinet se hable: “Hay que conservar el orden, la disciplina, la autoridad y la dignidad en la escuela, pero el orden que resulte de una mejor organización del trabajo, la disciplina que es la solución natural de una cooperación activa en el seno de nuestra sociedad escolar, la autoridad moral primero, técnica y humana después, que no se conquista con amenazas o castigos, sino con una maestría que inclina al respecto; la dignidad del educador no se puede concebir sin el respeto feroz de la dignidad de los niños que quiere preparar para su función de hombres.”

Moreno, José. (s.f.). Celestin Freinet. Recuperado el 24 de Junio de 2008, del sitio web de la Universidad abierta: http://www.universidadabierta.edu.mx/Biblio/M/Freinet-Moreno.htm

Célestin Freinet. (s.f.). Recuperado el 24 de Junio de 2008, de http://es.wikipedia.org/wiki/C%C3%A9lestin_Freinet

Freinet, C. (1994). Por una escuela del pueblo (2°. Ed.). México: Fontamara.

Freinet C. (2002). Los planes de trabajo. México: Fontamara.

Freinet C. (2005). Técnicas Freinet de la escuela moderna (36°. Ed.). México: Siglo XXI.

Pedagogía Calmécac

Es una bitácora diseñada como parte de un proyecto de la asignatura de Técnicas Bibliográficas, Hemerográficas y Documentales II de la carrera de Pedagogía del Sistema Universidad Abierta de la UNAM

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